CAPÍTULO 7
DESCRIPCIÓN DE LA
ESCENA
Caminando por el Río Carlos muy
temprano una mañana de primavera, un amigo y yo nos encontramos con una
artista pintando un retrato de flores silvestres. Con sólo algunas
brochadas, ella había capturado la belleza de la escena en el lienzo.
"Extraordinario", comenté. Pero mi amigo no estuvo de acuerdo. "Yo no creo
que sea tan bueno", susurró. "no lo pintó como realmente es... prefiero
tener algo más preciso".
Hoy en día, en la cultura occidental,
ponemos tal galardón al conocimiento preciso, al conocimiento científico
que frecuentemente pasamos por alto el valor de la descripción del artista
acerca de la realidad. Preferimos una fotografía a una pintura, un video a
una fotografía. Con estas ideas integradas profundamente muy dentro de
nosotros, puede ser muy difícil apreciar el retrato de un artista.
Pero debemos de aprender a apreciar las
descripciones de los artistas si vamos a investigar las historias del
Antiguo Testamento. Las historias del Antiguo Testamento no son ni
fotografías francas ni videos de vigilancia; no nos dan un registro
extenso, detallado de los eventos. Por el contrario, las historias del
Antiguo Testamento presentan retratos creativos de la historia de Israel.
En los capítulos anteriores, vimos cómo
presentan a los personajes artísticamente las historias del Antiguo
Testamento; en este capítulo, consideramos las formas en que los
escritores del Antiguo Testamento pintaron las escenas. Para nuestros
propósitos las escenas pueden ser definidas como un conjunto de
circunstancias estrechamente relacionadas, de acciones y personajes que
forman los bloques básicos de construcción de las historias del Antiguo
Testamento. Al estar viendo estas unidades narrativas, examinaremos tres
aspectos principales: las divisiones de escena, el espacio y el tiempo en
las escenas, y la imaginación en las escenas. ¿Cómo podemos distinguir una
escena de otra? ¿Qué atención le debemos de dar a la cualidades de
espacio-tiempo? ¿Cómo usaron la imaginación en sus escenas los escritores
del Antiguo Testamento?
División de las escenas
"Divide y vencerás" es una estrategia
efectiva. Si un trabajo es demasiado grande para hacerlo todo de una vez,
lo podemos lograr paso por paso. Lo mismo es verdad para las
interpretación de las historias del Antiguo Testamento. La mayoría de los
textos son demasiado complejos para que nosotros los manejemos todos a la
vez. Por esta razón los dividiremos en sus unidades básicas y caminaremos
a través de ellos escena por escena. Consideraremos los obstáculos para
dividir las escenas, claves para hacer las divisiones y algunos ejemplos.
Obstáculos para dividir las escenas
Nos enfrentamos por lo menos a dos
obstáculos significativos cuando dividimos las historias del Antiguo
Testamento a sus unidades básicas. Una barrera viene de nosotros; la otra
reside en los textos mismos.
El primer problema está en nuestra
orientación hermenéutica. Puesto simplemente, a veces pensamos en las
escenas como en las unidades básicas de las historias Bíblicas. Los
antecedentes eclesiásticos y el entrenamiento formal generalmente nos
orientan hacia unidades más pequeñas. Pensamos principalmente en términos
de palabras, frases, cláusulas y enunciados. En el mejor de los casos nos
aventuramos al nivel de versículos. Estos elementos son importantes, pero
frecuentemente fallamos en ver el valor de las porciones más largas de las
historias del Antiguo Testamento.
Para superar este obstáculo, nos
acercaremos a las narraciones del Antiguo Testamento de la misma manera en
que lo hacemos con otras historias. Por ejemplo, cuando leemos Robinson
Crusoe, o un y trabajo más reciente tal como "El arpa de Davita", de
Potok, una palabra especial o un giro de una frase puede captar nuestra
atención en ocasiones. Pero la mayoría de las veces, reflexionamos en
estas historias en términos de escenas. Recordamos la primera vez que
Crusoe vio huellas de pies en la arena; recordamos la trágica escena en la
que Davita se entera de la muerte de su padre.
Hay ocasiones en que necesitamos
enfocarnos en los detalles más pequeños de las historias del Antiguo
Testamento. Pero entender estos textos depende más en la habilidad de
pensar en términos de las escenas. Por lo tanto, debemos de deshacernos de
nuestra orientación microscópica de costumbre al estar investigando.
El segundo problema con establecer las
divisiones de las escenas está en las historias mismas del Antiguo
Testamento. A diferencia de otras formas de relatar historias, estos
textos no marcan explícitamente en dónde comienzan y terminan las escenas.
Una tira cómica indica las escenas separando los cuadros; cada cuadro
presenta un conjunto distinto de circunstancias, acciones y personajes
interactivos. Las obras distinguen las escenas actuando en diferentes
partes del escenario, subiendo y bajando la cortina. En contraste, las
narraciones del Antiguo Testamento tienden a ir suavemente de una escena a
la siguiente. Los límites muy rara vez son bruscos.
Como resultado, los lectores pueden
estar en desacuerdo precisamente en cómo dividir un texto. Algunos van a
estar inclinados a hacer escenas más largas; otros las harán más cortas.
Algunos dividirán el texto en un punto; otros variarán por uno o dos
versículos. Debemos de ser flexibles al dividir las historias del Antiguo
Testamento en escenas.
Claves para las divisiones
Cualquiera que sean los obstáculos que
enfrentemos, las historias del Antiguo Testamento ofrecen muchas claves
para establecer las divisiones de las escenas. Al familiarizarnos con
estas claves, descubriremos muchos límites más fácilmente. Podemos separar
una escena de la otra al notar cambios significativos en tiempo, ambiente
y modo de narración.
Tiempo. Los cambios
significativos en el tiempo frecuentemente indican los límites de escenas.
Las historias del Antiguo Testamento no presentan siempre eventos que se
engranan herméticamente en orden cronológicamente preciso. Sino que
frecuentemente interrumpen la cadena de eventos por descansos
subsecuentes, simultáneos y precedentes en la secuencia.
Primero, estos cambio temporales
aparecen como huecos entre eventos subsecuentes. Un bloque de acciones se
encuentra aparte del próximo debido al largo lapso de tiempo relativamente
hablando.
Algunas veces los escritores del
Antiguo Testamento indicaron estos huecos explícitamente. Las referencias
a "el próximo día" (mmhrt), "mañana" (bqr), "tarde" (´rb), "meses" (hds),
"años" (snh), y "después" de un tiempo frecuentemente designan el comienzo
de una nueva escena. Las expresiones "y él (ellos) se levantaron" (skm) y
"sucedió que" (wyhy) indican típicamente un descanso.
Pero los huecos en el tiempo
subsecuente no siempre aparecen tan simplemente. Por ejemplo, el típico
"y/entonces" (waw consecutivo) construcción, tan prominente en la
narrativa Hebrea, marca tanto la acción inmediata como la acción después
de un paso de tiempo significativo. En muchos casos los escritores del
Antiguo Testamento no hicieron comentarios temporales explícitos porque
esperaban que sus audiencias reconocieran el descanso. Segundo, los
escritores del Antiguo Testamento distinguieron las escenas cambiando a
acciones simultáneas. Los cines presentan frecuentemente eventos
simultáneos en una pantalla dividida o cambiando rápidamente de una a otra
escena. En una obra dos o más eventos se pueden llevar a cabo en el
escenario al mismo tiempo. Pero los eventos que suceden al mismo tiempo en
el mundo real siguen uno después del otro en el mundo de la narración.
Como resultado las historias retrasan el mismo período de tiempo, aunque
el texto se mueva hacia adelante en la siguiente hoja. Este retraso
frecuentemente indica una nueva escena.
Frecuentemente ocurren los cambios a
eventos simultáneos en las historias del Antiguo Testamento. Algunas veces
las construcciones Hebreas (frecuentemente un simple waw) indica acción
simultánea. Por ejemplo, después de describir la oración de Ana y su voto
(1 Samuel 1:10-11), el escritor de Samuel mencionó que Elí la había estado
observando: "Mientras ella oraba largamente delante de Jehová, Elí estaba
observando la boca de ella." (w´ly smr ´t pyh) (1 Samuel 1:12). De manera
similar, cuando Faraón llevó a Sarai a su palacio, "Él hizo bien a Abram
por causa de ella" (wl´brm hytb b´bwrh) (Génesis 12:16ª). Abram recibió
buen trato en tanto que Sarai continuó en el harén real. En estos y otros
pasajes similares, la gramática indica eventos simultáneos.
Sin embargo, en muchos casos, la
gramática no denota explícitamente simultaneidad. Sólo al evaluar los
contenidos notamos tal cambio. Por ejemplo, después de que Jonás predicó a
Nínive, toda la ciudad creyó y se unió en ayuno (Jonás 3:5). Parece
improbable que la siguiente escena, en la que el rey declaró un ayuno
(Jonás 3:6-7), fuera completamente subsecuente al arrepentimiento de toda
la ciudad. Probablemente algún traslape ocurrió entre los eventos. En
estas situaciones los lectores originales simplemente proporcionaron
"mientras tanto..." de su evaluación del contenido.
Tercero, los cambios temporales ocurren
cuando las escenas retroceden a las acciones antecedentes - eventos
completados antes de la escena actual. En ocasiones la gramática Hebrea
revela estas acciones antecedentes y frecuentemente la traducción en
Inglés hace estos cambios muy claros también. Sin embargo, algunas veces,
debemos de contar con el contenido para decirnos que estamos tratando con
una acción que ya ocurrió de antemano.
Las escenas antecedentes frecuentemente
suman unos retratos en viñeta de información de fondo. Después de
mencionar que Sisac había puesto sitio en contra de Jerusalén (2 Crónicas
12:2), el cronista retrocede hacia la campaña anterior de Sisac por Judá
(2 Crónicas 12:3-4). Los cambios antecedentes como este generalmente
indican el comienzo de una nueva escena.
En resumen, los descansos temporales
entre escenas ocurren de tres maneras: huecos entre eventos subsecuentes,
cambios a acciones simultáneas y regresiones a eventos antecedentes. Al
notar estos cambios, seremos capaces de identificar muchas escenas en las
narraciones del Antiguo Testamento.
Abiente. Los cambios en el
ambiente también nos ayudan a definir los límites de la escena. Hablaremos
de tres cambios importantes en el ambiente: lugar, características del
medio ambiente, y personajes.
Primero, las variaciones en el lugar
marca escenas. Por ejemplo, el registro de Sodoma y Gomorra se mueve de la
puerta de la ciudad (Génesis 19:1-2) hacia el hogar de Lot (Génesis 19:3).
En tanto que Abram y Sarai viajaron hacia Egipto, Génesis 12:11 los ubica
en la frontera, pero Génesis 12:14 los pone en Egipto mismo. Después de
que Dios bajó a ver la Torre de Babel (Génesis 11:5), Él regresó al cielo
y llamó a las huestes celestiales para actuar (Génesis 11:6-7).
Debemos de agregar un requisito.
Frecuentemente una escena individual contendrá teichoscopies - la mención
de eventos fuera del escenario. La escena puede estar orientada hacia un
lugar pero referirse a algo en otra situación. La Teicoscopía ocurre con
más frecuencia en discursos directos en donde los personajes están
hablando de eventos que se llevaron a cabo en otro lugar. Por ejemplo,
cuando Dios comisionó a Moisés en la zarza ardiente, Él ser refirió a
eventos en Egipto, aunque la escena en sí misma estaba ubicada en el
desierto (Éxodo 3:7-10). Cuando Mical le reprochó a David por su conducta
ante el arca, ella ser refirió a lo que ella había visto fuera de su
ventana (2 Samuel 6:20-23). La Teicoscopía no indica una división de
escena pero debe de ser tratada simplemente como parte de una larga
escena.
Segundo, los cambios significativos en
las características del medio ambiente también dividen una escena de otra.
Frecuentemente, varias escenas, aún historias completas, ocurrirán en un
lugar. Y aún debemos de buscar los ambientes externos para variar.
Las variaciones ambientales pueden
incluir de lo obscuro a la luz, de lo frío a lo caliente o de la sequía a
la lluvia. Un escritor puede dar simplemente nuevos hechos acerca de la
geografía, de los animales, de la vida vegetal y de las construcciones.
Las características ambientales pueden incluir también variaciones de
espacio y tiempo. La primera escena puede ser panorámica y la siguiente
estrechamente enfocada; una escena puede ser rápida y la siguiente lenta.
Los escritores del Antiguo Testamento frecuentemente indicaron los límites
de las escenas al cambiar las características ambientales.
Tercero, los escritores del Antiguo
Testamento dividieron las escenas al cambiar los personajes que ocupaban
el escenario. Estos cambios reflejan estrechamente cambios en el ambiente
pero involucran personas: seres humanos, criaturas sobrenaturales, y la
Deidad. El escenario de una historia puede estar lleno de gente en una
escena y casi vacía en la siguiente. Algunas veces una escena con uno o
dos personajes precede a una escena con innumerables participantes. Otras
veces el número de personajes permanece igual, pero sus identidades
cambian. Estas claves nos ayudan a separar las escenas. Debemos de estar
alertas a estas variaciones en lugar, características ambientales, y
personajes en tanto que busquemos las escenas en las historias del Antiguo
Testamento.
Modo de narración. Las escenas
también se dividen teniendo en cuenta los cambios en el modo de narración.
El modo narrativo se determina por el grado en que se siente la presencia
del escritor, ya sea que esté en el centro del escenario o que permanezca
entre los bastidores, permitiendo que los personajes mismos cuenten la
historia a través de sus propios pensamientos, palabras y acciones. Los
cambios de un modo a otro proporcionan claves importantes para dividir las
escenas. Para lograr nuestros propósitos, distinguiremos cuatro modos de
narración: comentarios del autor, descripción, narración directa, y
representación dramática.
Primero, los escritores se dirigieron
directamente a sus audiencias por medio de comentarios del autor, escenas
en las que ellos evaluaron o explicaron algo en la historia. Por ejemplo,
después de reportar el gozo de Adán al ver a Eva, Moisés da un paso hacia
delante y comenta: "Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y
se unirá a su mujer y serán una sola carne". (Génesis 2:24). De manera
similar, al final de la lucha de Jacob en Peniel (Génesis 32:22-32),
Moisés explicó: "Por esto no comen los hijos de Israel, hasta hoy día del
tendón que se contrajo, el cual está en el encaje del muslo; porque tocó a
Jacob este sitio de su muslo en el tendón que se contrajo". En ambos
versículos la historia en sí se detiene, y Moisés insertó su propio
comentario. Generalmente los comentarios del autor como estos forman sus
propias escenas.
Segundo, los escritores del Antiguo
Testamento frecuentemente escribieron en un modo de descripción. Ellos se
quitaron del centro del escenario y dieron un paso hacia atrás pero
detuvieron el progreso del registro para agregar detalles descriptivos. El
modo descriptivo se parece a los comentarios del autor, pero es menos
explicativo. Agrega información de destaca algunas características de la
narración. Por ejemplo, la historia de la migración de Abram (Génesis
1:1-9) contiene dos escenas descriptivas. Después de reportar que Abram
salió de la tierra, Moisés agregó: "Y era Abram de edad de setenta y cinco
años cuando salió de Harán" (Génesis 12:4b). Después de que Abram había
entrado a la tierra de Canaán, Moisés comentó a sus lectores: "y el
cananeo estaba entonces en la tierra" (Génesis 12:6b). Moisés se aseguró
de dar algunos detalles descriptivos, pero no tan fuertemente como un
comentario del autor.
Tercero, las escenas aparecen en
narración directa. En este modo el escritor permitió a sus lectores que se
fijaran directamente en la acción que se estaba llevando a cabo. Nosotros
reconocemos que los eventos son mediados a través del autor, pero estamos
en contacto más directo con el drama que con sus descripciones y
comentarios. Por ejemplo, después de que Jacob murió leemos: "Y mandó José
a sus siervos los médicos que embalsamasen a su padre" (Génesis 50:2ª). En
este versículo Moisés no permitió que José mismo hablara; el meramente
reportó que el evento se llevó a cabo. Llamaremos a tal reporte narración
directa.
Cuarto, en el modo dramático, el autor
se movió hacia el fondo. En lugar de reportar que algo había pasado, él
permitió que sus personajes hablaran, pensaran e interactuaran por sí
mismos. Este modo es más común en las narraciones del Antiguo Testamento
por medio del discurso directo. Aunque Moisés meramente reporta las
instrucciones de José a los médicos (Génesis 50:2ª), en unos versículos
posteriores, él permite que José hable y diga:
"Si he hallado ahora gracia en vuestros ojos, os ruego que
habléis en oídos de Faraón, diciendo: Mi padre me hizo jurar, diciendo:
He aquí que voy a morir; en el sepulcro que cavé para mí en la tierra de
Canaán, allí me sepultarás; ruego, pues, que vaya yo ahora y sepulte a
mi padre, y volveré" (Génesis: 50:4b-5)
Aparte de una breve introducción,
Moisés está ausente de este pasaje. El presentó las palabras de José por
medio de una narración dramática.
En la historia de la Torre de Babel
(Génesis 11:1-9), vemos los cuatro modos de narración. Considera los
siguientes ejemplos:
[Comentario] Por esto fue llamado el nombre de ella Babel,
porque allí confundió Jehová el lenguaje de toda la tierra, y desde allí
los esparció sobre la faz de toda la tierra (Génesis 11:9).
[Descripción] Y les sirvió el ladrillo en lugar de piedra, y
el asfalto en lugar de mezcla (Génesis 11:3b).
[Directo] Y aconteció que cuando salieron de oriente,
hallaron una llanura en la tierra de Sinar, y se establecieron allí
(Génesis 11:2).
[Dramático*] Y se dijeron unos a otros: Vamos, hagamos
ladrillo y cozámoslo con fuego (Génesis 11:3ª).
Como lo ilustran estos ejemplos, la
presencia de Moisés fue inevitable en su comentario (Génesis 11:9); el se
afirmó a sí mismo un poco menos en su descripción (Génesis 11:3b); el fue
más allá en la narración directa (Génesis 11:2); y casi desaparece en
tanto que hablaban los personajes uno al otro en la narración dramática
(Génesis 11:3ª).
Estos modos no son absolutamente
distintos. Forman un continuo y frecuentemente aparecen mezclados uno con
otro. Sin embargo, los cambios en el modo de narración frecuentemente
forman límites para las escenas en las historias del Antiguo Testamento.
Al considerar estos cambios, encontramos otro juego de claves para dividir
las escenas.
La figura 16 muestra las tres formas
principales para discernir los límites de escenas en las historias del
Antiguo Testamento: los cambios en el tiempo a recesos subsecuentes,
simultáneos y antecedentes en la acción; los cambios en el medio ambiente
por medio de un cambio de lugar, las características del medio ambiente, y
los personajes; y los cambios en el modo narrativo por medio de
comentarios, descripción, y narración directa y dramática. Estas
características nos ayudan a dividir las historias del Antiguo Testamento
en sus unidades básicas.
Ejemplos
Para ilustrar el proceso de dividir
escenas, veremos dos pasajes: Génesis 15:7-21 y 2 Crónicas 12:1-12, que
proporcionará ejemplos de varias claves para dividir escenas.
Génesis 15:7-21. Veamos primero
la historia del pacto de Dios con Abram.
Escena Uno
Y le dijo: Yo soy Jehová, que te saqué de Ur de los caldeos,
para darte a heredar esta tierra. Y él respondió: Señor Jehová, ¿en qué
conoceré que la he de heredar? Y le dijo: Tráeme una becerra de tres
años, y una cabra de tres años, y un carnero de tres años, una tórtola
también, y un palomino. (v. 7-9).
Escena Dos
Y tomó él todo esto, y los partió por la mitad, y puso cada
mitad una enfrente de la otra; mas no partió las aves. (v.
10).
Escena Tres
Y descendían aves de rapiña sobre los cuerpos muertos, y
Abram las ahuyentaba. (v. 11).
Escena Cuatro
Mas a la caída del sol sobrecogió el sueño a Abram, y he
aquí que el temor de una grande oscuridad cayó sobre él. Entonces Jehová
dijo a Abra: Ten por cierto que tu descendencia morará en tierra ajena,
y será esclava allí, y será oprimida cuatrocientos años. mas también a
la nación a la cual servirá, juzgaré yo; y después de esto saldrán con
gran riqueza. Y tu vendrás a tus padres en paz, y serás sepultado en
buena vejez. Y en la cuarta generación volverán acá; porque aún no ha
llegado a su colmo la maldad del amorreo hasta aquí. (v.
12-16)
Escena Cinco
Y sucedió que puesto el sol, y ya oscurecido se veía un
horno humeando, y una antorcha de fuego que pasaba por entre los
animales divididos. (v. 17)
Escena Seis
En aquel día hizo Jehová un pacto con Abram, diciendo: A tu
descendencia daré esta tierra, desde el río de Egipto hasta el río
grande, el río Eufrates; la tierra de los ceneos, los cenezeos, los
cadmoneos, los heteos, los ferezeos, los refaítas, los amorreos, los
cananeos, los gergeseos y los jebuseos. (vv. 18-21)
Los cambios significativos en el tiempo
marcan varios descansos entre escenas. El principio de Génesis 15:12 dice,
"Mas a la caída del sol". Este comentario de tiempo indica más bien que
una escena nueva ha comenzado. En el versículo 17 "puesto el sol" separa
el versículo de lo que sucedió anteriormente. Las referencias temporales
en el versículo 18 "en aquel día" sugiere que los últimos versículos forma
una nueva escena simultánea.
Esta historia también contiene por lo
menos un ejemplo de un descanso temporal menos explícito. Hemos puesto una
división de escena en el versículo 10. El texto no dice nada acerca de
cómo Abram obtuvo los animales, los inspeccionó y los preparó para la
ceremonia antes de traerlos ante Dios. La omisión de estos eventos
presenta una hueco significativo entre los eventos subsecuentes.
Estos cambios en el tiempo están
confirmados por cambios en el medio ambiente. Ninguna variación más grande
de lugar ocurre en esta historia; todas las acciones se llevan a cabo en
el mismo espacio geográfico. Incluso aparecen cambios en las
características ambientales. En las segunda escena (v. 10) los animales,
la sangre y la matanza rodean a Abram. En la tercer escena (v. 11), se
entrometen aves de rapiña. El misterioso gris del crepúsculo, la oscuridad
interior de la mente de Abram, y las teicoscopías del futuro están
incluidos en el ambiente de la cuarta escena (v. 12-16). La oscuridad
exterior del mundo iluminada por la antorcha de fuego y el horno humeando
pone el escenario para la siguiente escena (v. 17). Finalmente, las
referencias de toda la tierra promedia a Abram caracteriza la última
escena (v. 18-21).
Los cambios de personajes coinciden con
estas divisiones. En la primera escena, Dios y Abram son ambos
participantes activos (v. 7-9). En la segunda escena, Abram están en el
centro (vs. 10), y apenas se menciona a Dios. La tercera escena presenta
únicamente a Abram (v. 11). La cuarta escena tiene que ver con Abram,
Dios, y la descendencia de Abraham (vv. 12-16). La quinta escena describe
solamente a Dios en teofanía (v. 17). En la última escena, Dios, Abram y
los descendientes de Abraham todos ocupan el primer plano (vv. 18-21).
Finalmente, los cambios en el modo de
narración nos ayudan a dividir la historia en unidades básicas. La primera
escena es predominantemente un diálogo dramático entre Dios y Abram (vv.
7-9). Las siguientes dos escenas son narración directa, informando de los
preparativos de Abram para la ceremonia del pacto (vv. 10-11). En la
escena cuatro hacemos un giro hacia el monólogo dramático en el sueño de
Abram (vv. 12-16). La quinta escena es narración directa describiendo la
acción de Dios en teofanía (v. 17). La última escena presenta una
dramático monólogo divino. (vv.18-21).
Estas observaciones nos permite resumir
la línea básica de la historia como sigue:
- Escena Uno (Génesis 15:7-9) [Dramático] [S5, T1]
Dios prometió a
Abram la tierra y respondió a su petición de seguridad ordenándoles una
ceremonia de un pacto.
- Escena Dos (Génesis 15:10) [Directo] [S10, T10]
Como resultado
Abram obedeció preparándose para la ceremonia.
- Escena Tres (Génesis 15:11) [Directo] [S10, T8]
También Abram
guarda la ceremonia santificada al ahuyentar las aves de rapiña.
- Escena Cuatro (Génesis 15:12-16) [Dramático] [S1, T1]
Al
crepúsculo Abram recibe una revelación en sueño.
- Escena Cinco (Génesis 15: 17) [Dramático] [S10, T8]
Esa noche más
tarde una teofanía pasó entre la matanza.
- Escena Seis (Génesis 15:18-21) [Dramático] [S5, T1]
En esa hora,
Dios establece Su pacto de la posesión de la tierra Abram y a sus
descendientes.
2 Crónicas 12:1-12. Una segunda
historia, la invasión de Sisac en la región de Roboam, se divide en diez
escenas.
Escena Uno
Cuando Roboam había consolidado el reino, dejó la ley de
Jehová, y todo Israel con él. (v.1)
Escena Dos
Y por cuanto se habían rebelado contra Jehová, en el quinto
año del rey Roboam subió Sisac Rey de Egipto contra Jerusalén. (v.
2)
Escena Tres
Con mil doscientos carro, y con sesenta mil hombres de a
caballo; mas el pueblo que venía con él de Egipto, esto es, de libios,
suquienos y etíopes, no tenía número. (vv. 3-4)
Escena Cuatro
Entonces vino el profeta Semaías a Roboam y a los príncipes
de Judá, que estaban reunidos en Jerusalén por causa de Sisac, y les
dijo: así ha dicho Jehová: Vosotros me habéis dejado, y yo también os he
dejado en manos de Sisac. (v. 5)
Escena Cinco
Y los príncipes de Israel y el rey se humillaron, y dijeron:
Justo es Jehová. (v. 6)
Escena Seis
Y cuando Jehová vio que se habían humillado, vino palabra de
Jehová a Semaías, diciendo: Se han humillado; no los destruiré; antes
los salvaré en breve, y no se derramará mi ira contra Jerusalén por mano
de Sisac. Pero serán sus siervos, para que sepan lo que es servirme a
mí, y que es servir a los reinos de las naciones. (vv. 7-8)
Escena Siete
Subió, pues, Sisac rey de Egipto a Jerusalén, y tomó los
tesoros de la casa de Jehová, y los tesoros de la casa del rey; todo lo
llevó, y tomó los escudos de oro que Salomón había hecho. (v.
9)
Escena Ocho
Y en lugar de ellos hizo el rey Roboam escudos de bronce, y
los entregó a los jefes de la guardia, los cuales custodiaban la entrada
de la casa del rey. (v. 10)
Escena Nueve
Cuando el rey iba a la casa de Jehová, venían los de la
guardia y los llevaban, y después los volvían a la cámara de la
guardia.
Escena Diez
Y cuando él se humilló, la ira de Jehová se apartó de él,
para no destruirlo del todo; y también en Judá las cosas fueron
bien.
Los cambios en el tiempo son complejos
en esta historia. En la segunda escena (v. 2), leemos una designación
explícita de tiempo: "en el quinto año del rey Roboam". Esta escena
presenta a Sisac y a su ejército en sitio "contra Jerusalén". No se
menciona el sitio hasta la séptima escena (v. 9), "Subió, pues, Sisac rey
de Egipto a Jerusalén". En cambio, la tercera escena (vv. 3,4) regresa a
la campaña antecedente en contra de las ciudades de Judá. El versículo 5
comienza la cuarta escena con un evento que ocurrió simultáneamente con la
campaña de Sisac. Seamías el profeta dio un oráculo de juicio en contra de
la nobleza de Judá. La quinta escena (v. 6) reporta el arrepentimiento de
la nobleza. La escena seis (vv. 7-8) registra que simultáneamente el Señor
envió palabra de esperanza por medio del profeta. La escena siete (v. 9)
se mueve al sitio y al botín tomado por Sisac. La escena ocho (v. 10)
sigue la consecuencia de la derrota, mostrando que no todo estaba perdido.
La escena nueve (v. 11) extiende la narración a las prácticas prolongadas
del rey. La última escena (v. 12) resume la experiencia continua de Roboam
y Judá.
Dos medio ambientes surgen en esta
historia. La primera y la segunda escena están situadas en y alrededor de
Jerusalén (vv. 1-2). Pero la escena tres cambia a la campaña en contra de
Judá (vv. 3-4). Desde la cuarta a la última escena, regresamos a Jerusalén
- en el palacio, en el cuarto de los guardas y en el templo (vv. 5-12).
Los cambios en los personajes son
también significativos. En la escena uno Roboam, Israel y el Señor son
mencionan (v. 1). La escena dos y tres se enfocan principalmente en Sisac
y su ejército innumerable (vv. 2-4). El número de personajes cambia
abruptamente en la escena cuatro con Semaías, los líderes y el Señor (v.
5). Se omite a Semaías en la quinta escena (v. 6), pero la escena seis
retorna al profeta con el Señor, el rey, y los líderes (vv. 7-8).
Finalmente, esta historia también
contiene cambios en el modo de narración. La escen uno es narrativa
directa; la escena dos contiene un breve comentario del autor ("Y por
cuanto se habían rebelado contra Jehová...") pero es principalmente
narrativa directa. La escena tres es en gran parte descriptiva, informando
el tamaño del ejército de Sisac, y las escenas cuatro a la seis son
discurso dramático. La advertencia del profeta (v. 5) contiene
teicoscopías que recolectan los eventos antecedentes. La respuesta de Dios
al arrepentimiento reportan lo que sucederá. Las escenas siete hasta el
final presentan narración directa del botín de Sisac y de las prácticas
continuas de Roboam.
Al dividir esta historia en estas
escenas, podemos resumir su flujo básico.
- Escena Uno (2 Crónicas 12:1) [Directo] [S10, T10]
Aunque Roboam
estaba establecido, él y Judá abandonaron la Ley de Dios.
- Escena Dos (2 Crónicas 12:2) [Directo] [S6, T6]
Debido a la
rebelión de Roboam, Sisac puso sitio en contra de Jerusalén.
- Escena Tres (2 Crónicas 12:3-4) [Descriptivo] [S9, T9]
Antes del
sitio, la armada masiva de Sisac había saqueado las ciudades de Judá.
- Escena Cuatro (2 Crónicas 12:5) [Dramático] [S1, T1]
Durante este
tiempo Semaías anunció una advertencia a la nobleza de Judá.
- Escena Cinco (2 Crónicas 12:6) [Dramático] [S1 T1]
Como resultado
los líderes de Judá y Roboam se arrepintieron.
- Escena Seis (2 Crónicas 12:7-8) [Dramático] [S1 T1]
Mientras
tanto, Semaías anunció una medida de liberación.
- Escena Siete (2 Crónicas 12: 9) [Directo] [S8, T8]
Como resultado
del sitio, Sisac tomó un tributo fuerte de Jerusalén, incluyendo los
escudos de oro de Salomón.
- Escena Ocho (2 de Crónicas 12:10) [Directo] [S4, T4]
Sin embargo,
Roboam no lo había perdido todo; el reemplazó los escudos de oro con
réplicas de bronce.
- Escena Nueve (2 Crónicas 12:11) [Directo] [S4, T4]
Es más, Roboam
frecuentaba el templo después de esto y sus armas estaban cuidadosamente
protegidas.
- Escena Diez (2 Crónicas 12:12) [Directo] [S10, T10]
En tanto
Roboam continuaba humillándose a sí mismo, las condiciones eran
buenas.
Dos consideraciones. Estos dos
ejemplos demuestran que dividir y resumir las escenas son pasos vitales en
nuestra investigación de las historias del Antiguo Testamento. Al resumir
el contenido de las escenas, nos ayuda tener en mente dos consideraciones.
Primero, los resúmenes deben de ser tan
sencillos como sea posible sin falsear el material. Generalmente, las
escenas contienen un número de detalles, y llegar a sus elementos
prominentes permite al intérprete manejar el material de una manera más
adecuada. Cuando expresamos estos elementos tan simplemente como sea
posible, nuestros resúmenes sirven como taquigrafía útil para identificar
los bloques que conforman la historia.
Segundo, también ayuda a formular
nuestros resúmenes para que puedan hacer interconexiones entre una escena
y la siguiente tan explícito como sea posible. Generalmente una expresión
que conecte será suficiente. Una o dos palabras ayuda a hacer estas
relaciones explícitas: "debido a", "antes de", "en tanto", "sin embargo",
y así sucesivamente. Al poner escenas una a lado de otra de esta manera,
ganamos un sentido de interconexiones que forman la cadena de los eventos
en la historia.
Al buscar cambios significativos en el
tiempo, medio ambiente y modo de narración, somos capaces de dividir una
historia en sus unidades fundamentales de pensamiento. Después, por medio
de resúmenes cuidadosos, podemos entender más completamente las formas en
que los escritores del Antiguo Testamento unieron sus historias.
El espacio y el Tiempo en las Escenas
Hace algunos años tomé clases de
cinematografía. Para el proyecto de mi clase, tenía que escribir una
historia y hacerla en una película animada corta. Un amigo y yo trabajamos
muchas noches haciendo la cinta de ocho milímetros. Antes de que
comenzáramos, yo no sabía nada acerca de cómo hacer una película. Asumí
que una cinta de tres minutos no tomaría demasiados dolores de cabeza,
pero pronto descubrí que estaba equivocado. Entre otras decisiones
técnicas, teníamos que determinar qué escenas necesitaban un acercamiento
y cuáles requerían un ángulo más amplio. Teníamos que decidir si usar
cámara lenta, la velocidad normal o cámara rápida. Estas decisiones
probaron ser cruciales para la calidad del producto final.
Los escritores del Antiguo Testamento
hicieron decisiones similares acerca del espacio y del tiempo en sus
escenas.
Variaciones del espacio
La orientación del espacio puede hacer
una gran diferencia en nuestras percepciones. Los escritores del Antiguo
Testamento influyeron en la percepción de sus lectores de la historia de
Israel al magnificar algunos eventos más que otros. Su estrategia del
espacio influyó drásticamente en el impacto original de sus historias. Al
explorar las narraciones del Antiguo Testamento, buscaremos maneras de
evaluar el foco del espacio de cada escena.
Como los fotógrafos, los escritores del
Antiguo Testamento dieron vistas panorámicas e hicieron acercamientos de
eventos externos. Pero ésta es solamente la mitad del cuadro. A diferencia
de los fotógrafos, también describieron el mundo interno de los
pensamientos y sentimientos de sus personajes. Ellos proporcionaron
acercamientos y perspectivas panorámicas de estas realidades internas
también. Veremos brevemente ambos lados de este espectro.
Las narraciones del Antiguo Testamento
generalmente presentaron una vista panorámica del mundo externo.
Frecuentemente estas extensas perspectivas unieron eventos que sucedieron
en varios lugares diferentes. Por ejemplo, en un sólo verso, Asa destruyó
los lugares altos y los altares en cada ciudad de Judá (2 Crónicas 14:5).
Pero los escritores del Antiguo
Testamento también enfocaron para un acercamiento del mundo exterior.
Algunas veces los acercamientos involucran interacción entre varios
personajes. Moisés se enfocó en Abraham e Isaac en el Monte Moriah
(Génesis 22:6-9). En otras ocasiones los escritores examinaban solamente a
una persona en privado. Después de huir por su vida, Elías se sentó sólo
debajo un enebro (1 Reyes 19:3b-5). En escenas con acercamiento como
éstos, generalmente, los escritores del Antiguo Testamento dieron más
atención a los detalles.
Los autores del Antiguo Testamento
también variaron su enfoque del espacio hacia el mundo interior. Por
ejemplo, Micaías hijo de Imla pintó un retrato panorámico de su visión del
cielo (1 Reyes 22:19-23), pero cuando Saúl ordenó a su escudero que lo
matara, Saúl se enfocó solamente en lo que hubiera pasado a él (1 Samuel
31:4) - un acercamiento.
Ya sea externa o interna, las
orientaciones de una escena pueden ser cruciales a la interpretación.
Frecuentemente el cambio de un enfoque a otro indica que una escena
particular es prominente en una historia. Una escena panorámica resalta en
un contexto de acercamientos, un acercamiento entre escenas panorámicas
también atrae atención hacia sí mismo. Al notar las variaciones en el
espacio en una historia, podemos tener la perspectiva del autor de una
manera más plena.
Variaciones Temporales
Los cineastas retardan y aceleran el
tiempo para lograr efectos dramáticos. Las películas antiguas contaban
grandemente con el movimiento rápido para dibujar el humor y el paso del
tiempo. Hoy en día los directores utilizan el movimiento lento para hacer
que perdure un momento romántico, para intensificar el horror de un evento
y para dar a los espectadores una oportunidad para ver cuidadosamente una
acción crucial.
Los escritores del Antiguo Testamento
manipularon el tiempo de maneras similares. Aunque no aumentaron la
velocidad o retardaron imágenes en una escena, ellos informaron de eventos
en un marco rápido y lento de tiempo. Así como las variaciones del espacio
suceden en ambos, el mundo exterior y el mundo interior, así el tiempo
varía en la descripción de las realidades externas y de los pensamientos
internos.
Primero, el tiempo en el mundo exterior
puede variar. La acción rápida tiende a caracterizar las historias del
Antiguo Testamento. El lenguaje directo se acerca al ritmo del tiempo
real, pero generalmente las escenas reportan eventos mucho más rápido de
lo que en realidad sucedieron, resultando en una calidad más rápida que la
realidad. Aún así, ocurren algunas variaciones significativas. En muchos
textos, una o dos escenas se aceleran más allá que el resto de la
historia. Cuando esto sucede, las escenas rápidas merecen especial
atención. Por otro lado, algunas escenas disminuyen su velocidad
significativamente, ocasionalmente hasta el paso de un caracol.
Frecuentemente estas porciones de la historia son especialmente cruciales.
Considera las variaciones temporales en
el registro del asesinato de Eglón (Jueces 3:14-26). En su mayoría, el
tiempo se va rápidamente. Se retarda un poco al entablarse un diálogo
entre Aod y Eglón (vv. 19-20). Pero en la escena crucial, cuando Aod
asesina al rey, no tenemos menos que un marco de cámara lenta.
Aod alcanzó con su mano izquierda, la
espada de su muslo derecho y la sumergió en el vientre del rey. Aún la
empuñadura entró tras la hoja que salió por la parte de atrás. Aod no sacó
la espada y la gordura la cubrió (vv. 21-22). Vemos cada fracción de
segundo: la mano alcanzando la espada, la espada en alto, la espada
sumergida en el vientre del rey, la empuñadura entrando tras la hoja, y la
gordura cubriéndola.
El sacrificio de Isaac tiene una
variación temporal similar. Hasta que Abram e Isaac llegan a Moriah, la
historia se mueve bastante rápido. Pero hasta que Abram prepara el altar,
leemos "... y ató a su hijo, y lo puso en el altar sobre la leña. Y
extendió Abraham su mano y tomó el cuchillo para degollar a su hijo"
(Génesis 22:9-10). Una vez más el tiempo casi ha llegado a un momento de
pausa, suspendiendo la tensión del momento.
Segundo, el mundo interior también
varía en proporción temporal. Si el ritmo aumenta dramáticamente,
frecuentemente refleja el sentido de urgencia y la intensidad del
personaje. Por ejemplo, Saúl le pidió a su escudero: "Saca tu espada y
traspásame con ella" (1 Crónicas 10:4). El paso rápido con que Saúl pensó
durante esta situación reflejó su pánico. Las escenas interiores también
pueden ser lentas. A veces los pensamientos internos de un personajes
apenas se vislumbran. Por ejemplo, los espías de Josué detallan muy bien
sus instrucciones a Rahab (Josué 2:17-20). El escritor de Josué reportó
este material en detalle para llamar la atención a los elementos
específicos en los juramentos entre Rahab y los espías.
Las narrativas del Antiguo Testamento
tienen una tendencia general hacia la progresión rápida temporal al estar
describiendo los mundos internos y externos del pasado. Aún así debemos de
tener en cuanta las escenas en las que el tiempo se acelera. Más que esto
debemos de observar el tiempo en que se retardan. Tales variaciones
temporales frecuentemente indican que una escena tiene una importancia
especial en la historia.
Ejemplos
Una manera conveniente de evaluar el
enfoque en el espacio es clasificar las escenas en una escala numérica.
Primero, identifica las escenas con enfoque más panorámico como
"E(espacio)10". Una escena que vale "E10" en una historia puede ser que no
tenga la misma extensión de una "E10" en otro pasaje. Pero con relación a
otras porciones de su propio episodio, una "E10" representa el ángulo más
amplio. Segundo, clasifica las escenas con el enfoque más cercano "E1",
con relación a otras escenas en la misma historia. Una vez que hemos
identificado los extremos, podemos clasificar todas las otras escenas
"E2-E9". Esta técnica nos permite reorganizar los modelos de enfoque en el
espacio de una ojeada.
Podemos describir la aceleración y
desaceleración temporal de una manera similar. Identifica las escenas más
rápidas como "T(tiempo)10" y las escenas más lentas como "T1". Después
coloca las otras escenas a lo largo de la escala. Siguiendo tal
procedimiento nos permite revisar rápidamente las variaciones temporales
en una historia.
Déjanos ilustrar esta técnica con
Génesis 15:7-21 y 2 Crónicas 12:1-12. Las variaciones temporales de
Génesis 15:7-21 no son drásticas. La porción más rápida de la historia
(T10) es la escena dos (v.10), cuando Abram inicia la ceremonia del pacto.
Las escenas tres (v.11) y cinco (v.17) son clasificadas "T8"; caen a la
mitad del rango en el espectro de las acciones externas. Las escenas más
lentas en esta historia involucran el lenguaje. La escena uno (vv. 7-9) es
un diálogo acerca de la certeza de la promesa (T1). La escena final hace
un paralelo a este ritmo lento al hacer Dios el voto de darle a Abram la
tierra (vv. 18-21). La cuarta escena (vv. 12-16) también se hace lenta a
"T1". El paso de esta escena central forma un pivote en esta historia.
Las variaciones de espacio en Génesis
15:7-21 hace paralelo al modelo temporal. Los ángulos más amplios se
encuentran en las escenas dos (cortando los animales), tres (ahuyentando
las aves de rapiña), y cinco (el humo y la antorcha). Hemos considerado
estas tres escenas como "S10". La escena cuatro tiene el enfoque de
espacio más bajo (vv. 12-14), reduciéndose a un acercamiento de Abram
durmiendo en terror.
Las variaciones de tiempo y espacio en
esta historia nos ayuda a ver qué escenas resaltó Moisés. Los reflectores
brillan fuertemente en las escenas uno y seis. La promesa de Dios, la
pregunta de Abram, y la respuesta de Dios en el principio (vv. 7-9) hacen
un paralelo del voto del pacto de Dios al final (vv. 18-21). El espacio se
hace más angosto y el tiempo más lento porque estas escenas son tan
importantes. Pero la combinación del enfoque temporal y del espacio en la
escena cuatro (vv. 12-16) que resalta la promesa de Dios de sacar a Israel
de Egipto y traerlos a la tierra. Esta escena habló directo a la audiencia
de Moisés; ellos habían visto que estas promesas se llevaron a cabo en sus
propias vidas y ahora podían tomar valor en el futuro.
Las variaciones espacio-tiempo en 2
Crónicas 12:1-12 forman un modelo diferente. La escena uno (v. 1) abre con
una rápida vista panorámica del cuarto año del reinado de Roboam (S10;
T10). En la escena dos (v. 2), el espacio se estrecha a la cercanía de
Jerusalén y al período del sitio en contra de la ciudad (S6, T6). En la
tercera escena (vv. 3-4) se mueve hasta arriba la escala en espacio y
tiempo al describir la campaña de Sisac por Judá (S10, T10). En las
escenas cuatro a la seis (vv. 5-8), el Cronista dio la porción más lenta y
más angosta de toda la historia (S1, T1). Comparado con el resto del
drama, las acciones del profeta y de los nobles tienen acercamiento y
están en cámara lenta. Como resultado estas escenas de confrontación y
arrepentimiento sobresalen en la historia. La escena siete (v.9) cambia
hacia la rápida vista panorámica (S8, T8), y rápidamente cuenta el fin del
sitio. Las próximas dos escenas (v. 10-11) se mueven hacia en medio (S4,
T4), y la escena final (v. 12) regresa a un paso rápido y enfoque amplio,
balanceada con la escena de apertura (S10, T10).
Estas observaciones ofrecen un número
de discernimientos dentro de la historia. La extensión de la tercera
escena y del detallado recuento del tamaño del ejército de Sisac dan un
sentido de amenaza severa en contra de Jerusalén. Después el enfoque lento
y angosto de la cuarta, quinta y sexta escena captan la atención de los
lectores al enfrentar los nobles al profeta. Los reflectores se
intensifican y el volumen aumenta al escuchar los oráculos de Dios y la
respuesta de la nobleza de Judá.
Nuestra breve inspección de estas
historias muestra que evaluar el espacio y el tiempo ofrece muchos
beneficios. Estamos alertas al enfoque del escritor, la prominencia
relativas de las escenas, y al balance entre varias secciones de una
historia. Al notar las variaciones de tiempo y de espacio, podemos
percibir muchas facetas de las narraciones del Antiguo Testamento que de
otra manera pueden pasar inadvertidas.
Imaginación en las escenas
El letrero decía "Vista panorámica". Yo
estaba cansado de manejar, así que nos detuvimos para echar un vistazo.
Pero uno de nuestros pasajeros no estaba emocionado con la idea. "Todo lo
que van a ver es un montón de colinas y granjas", refunfuñó desde atrás.
Tenía razón, pero también estaba
equivocado. Al estar nosotros allí, podíamos ver muchos kilómetros en
cualquier dirección. Pudimos ver carros abajo yendo por la autopista,
pintorescas granjas un poco más allá, colinas a la distancia y una ciudad
en el horizonte. Nuestro amigo nos había dado una información bastante
real, pero su información no era nada comparada con disfrutar de la vista
por sí misma.
Los escritores del Antiguo Testamento
les dieron a sus lectores vistas panorámicas de la historia de Israel.
Ellos relataron mucho más que una lista de hechos descubiertos y
principios abstractos. A través del uso de una imaginación vívida, ellos
invitaron a sus lectores a tener experiencias imaginativas y sensoriales
del pasado.
Obstáculos a la imaginación
Muchos evangélicos tienen dificultades
para apreciar las dimensiones sensoriales de las historias del Antiguo
Testamento. Por lo menos tres factores nos impiden investigar este aspecto
en el texto. Primero, comparada con otra literatura, la narrativa del
Antiguo Testamento no invierte mucho tiempo en detalles imaginativos.
Difícilmente compara el elaborar pinturas en la literatura moderna a la
que estamos acostumbrados. Rara vez encontramos descripciones detalladas
de las vistas o sonidos de la mañana; los textos nos dicen únicamente que
era de mañana (Josué 3:1). No descubrimos extensas discusiones de olores,
sabores o del tacto; las historias del Antiguo Testamento simplemente
reportan que la gente comió (1 Reyes 19:21). Porque la mayoría de las
narraciones del Antiguo Testamento usan la imaginación escasamente,
fácilmente la pasamos por alto.
Pero no debemos de permitir que la
escasez de imaginación nos impida apreciar lo que está allá. Los
escritores de Antiguo Testamento no fueron frívolos en sus descripciones
de escenas, así que cuando mencionen un detalle sensorial, debemos de
asumir que tuvieron un propósito. Debemos de prestar cuidadosa atención a
la mínima muestra de imaginación en las narrativas del Antiguo Testamento.
Segundo, frecuentemente pasamos por
alto la imaginación en las historias del Antiguo Testamento porque no
estamos familiarizados con las realidades históricas que describen. No
sabemos qué imágenes asociar con las palabras. Si una historia moderna
menciona el ruido de un avión o el ritmo de rock and roll, inmediatamente
asociamos las palabras con experiencias familiares. Pero pasamos por alto
muchas descripciones vívidas en las historias del Antiguo Testamento
porque no sabemos lo suficiente para apreciarlas.
Por ejemplo, la audiencia original de
Crónicas debió haber disfrutado las vistas y "el sonido de bocinas y
trompetas y címbalos, y al son de salterios y arpas" (1 Crónicas 15:28).
Pero nuestra falta de familiaridad con la música antigua pueden impedir
que leamos estas palabras con todo lo que valen. Consecuentemente, al
investigar el uso de la imaginación, debemos de tratar de identificarnos
con la audiencia original. ¿Cómo hubieran entendido ellos estas palabras?
¿Qué hubieran experimentado ellos? No debemos de permitir que nuestra
ignorancia del mundo antiguo obscurezca esta faceta de las historias del
Antiguo Testamento.
Tercero, pasamos por alto la
imaginación vívida por nuestras orientaciones hermenéuticas. En la mayoría
de los casos, buscamos en estos textos principalmente hechos y principios
teológicos. Para la mayoría de nosotros, el significado de una historia
del Antiguo Testamento consiste principalmente, si no exclusivamente, en
sus contribuciones a nuestro entendimiento histórico, teológico y moral.
Tratamos a la imaginación como un poquito más que a la ornamentación.
Pero Dios no nos dio historias
solamente para que nosotros elimináramos la imaginación que contienen. Si
hubiera decidido solamente darnos hechos y principios teológicos, Él lo
hubiera hecho así. Por el contrario, el Espíritu inspiró a los escritores
del Antiguo Testamento para componer historias que contuvieran
imaginación, y debemos de aprender a apreciar esta dimensión de sus
textos.
¿Por qué preocuparnos nosotros mismos
con la imaginación? ¿Cómo nos ayuda la imaginación a entender las
historias del Antiguo Testamento? ¿Qué ventajas ofrece? Primero, buscando
la imaginación nos causa pensar. Al estar consciente del poder imaginativo
de una escena nos causará contemplar los detalles del texto más a fondo.
Segundo, reflexionar en la imaginación da a nuestro entendimiento
vitalidad ; el texto se hace real y nos involucra. Más que simplemente
catalogar los eventos desde el pasado gris de las narrativas del Antiguo
Testamento ahora explotan en colores vivos. Tercero, la imaginación nos
afecta emocionalmente al contemplar la imaginación de una escena. Es
difícil no ser afectado en un nivel emocional.
La imaginación contribuye
significativamente al poder de las historias del Antiguo Testamento. Al
investigar su significado original, debemos de buscar el rango completo de
experiencias sensoriales que ofrecieron a sus lectores originales.
Tipo de Imaginación
Las historias del Antiguo Testamento
tocan todos nuestros sentidos. De muchas maneras diferentes, los
escritores describieron las circunstancias, acciones y personajes de sus
historias así que ofrecían experiencias visuales, auditivas, táctiles,
olfativas y gustativas a sus audiencias.
Visual. Los escritores del
Antiguo Testamento confiaron en la imaginación visual más que en cualquier
otra. Ellos describieron escenas para que sus lectores pudieran ver el
pasado con los ojos de su mente. Podemos buscar imaginación visual en los
tres elementos principales de una escena: circunstancias, acciones y
personajes. ¿Cómo apareció la escena? ¿Cómo son los personajes? ¿Cómo se
llevaron a cabo las acciones? En tanto que las escenas nos cuentan más
detalles, podemos reflejar más allá, pero aún la mención ligera de tales
asuntos presentan imágenes visuales para completar.
Considera el simple ejemplo de Josué
3:1: "Josué se levantó de mañana, y él y todos los hijos de Israel
partieron de Sitim y vinieron hasta el Jordán, y reposaron allí antes de
pasarlo. Este corto versículo presenta un número vívido de vistas. Las
circunstancias de mañana evocan visiones de un alba rompiendo la penumbra.
Vemos el campamento en Sitim y en el Río Jordán. Los principales
personajes también aparecen: el guerrero Josué y sus hombres, mujeres y
niños con él. Vemos también gente levantándose, quitando el campamento,
organizándose para el viaje, marchando hacia delante, y poniendo el
campamento en el Jordán. Estas impresiones forman una dimensión vital del
significado original de la historia.
Auditiva. Los escritores del
Antiguo Testamento al componer sus escenas, también presentaron
imaginación auditiva. Los sonidos jugaron un papel vital en sus historias.
¿Qué tipo de imaginación auditiva aparece en las historias del Antiguo
Testamento? ¿Qué sonidos escucharon las audiencias originales?
Una vez más podemos pensar en términos
de circunstancias, acciones y personajes. Las circunstancias en una escena
frecuentemente acarrea sonidos, aún si no son destacados explícitamente.
Muchas acciones producen ruidos. Los personajes también producen sonidos
cuando hablan, lloran, o gritan.
Primero de Reyes 22:34 provee un buen
ejemplo de imágenes de audición: "Y un hombre disparó su arco a la ventura
e hirió al rey de Israel por entre las junturas de la armadura, por lo que
dijo él a su cochero: Da la vuelta, y sácame del campo, pues estoy
herido."
Algunos de los sonidos de esta escena
son más explícitos que otros. La imagen auditiva más obvia viene del
personaje de Acab. Su desesperado grito resuena. Pero muchos otros ruidos
son comunicados por esta escena. Acaba estaba en una batalla -
difícilmente un lugar silencioso. El clamor y el grito, el chocar de las
espadas y los escudos, gritos de enojo y dolor forman el ruido constante
del fondo. En particular, el escritor se enfocó a la acción de un hombre
disparando su arco. La flecha silba por el aire y perfora el cuerpo del
rey. Aún estas pocas especificaciones nos dan muchas experiencias
auditivas.
Táctiles. También podemos
encontrar imaginación táctil en las historias del Antiguo Testamento,
tanto externas como internas. La imaginación táctil externa es la
experiencia de tocar cosas fuera de nosotros mismos y sentir su textura,
peso o temperatura. La imaginación táctil interna es la sensación de
dentro: el latido del corazón, la respiración, la tensión, la relajación,
el dolor y el placer. Estas imágenes de toque también funcionan en
conjunto con las circunstancias, acciones y personajes.
Una ilustración pertinente de la
imaginación táctica viene en una escena de la historia de Sansón: "Mas los
filisteos le echaron mano, y le sacaron los ojos, y le llevaron a Gaza; y
le ataron con cadenas para que moliese en la cárcel" (Jueces 16:21).
Fracasamos en captar el significado de este pasaje si lo reducimos a una
declaración de hechos: "Los filisteos capturaron a Sansón", o un
principio: "El pecado trae castigo divino". La imaginación tangible
encierra a la audiencia en los horrores repugnantes que se infligieron
sobre su héroe: el dolor penetrante de la sacada de ojos de Sansón, las
cortadas y las contusiones que él sufrió en tanto los filisteos lo
llevaban a Gaza, el peso de las cadenas de bronce, la opresión de empujar
una piedra de molino maciza. Debemos de apreciar el dolor de Sansón si
vamos a leer esta historia como lo quiso el escritor de Jueces.
Algunas escenas contienen más imágenes
táctiles que otras. Aún así la simple mención de ciertas situaciones,
personajes y acciones trajeron experiencias táctiles ineludibles a las
mentes de sus lectores.
Olfativas. Las narraciones del
Antiguo Testamento también presentan imaginación olfativa. Los olores
ocurren con menos frecuencia que la imaginación visual, auditiva y táctil,
pero aparecen y también están asociadas con circunstancias, acciones y
personajes. Un ejemplo obvio de la imaginación olfativa se puede encontrar
en Génesis 27:27-28:
Y Jacob se acercó, y le besó; y olió Isaac el olor de sus
vestidos, y le bendijo, diciendo: Mira, el olor de mi hijo, como el olor
del campo que Jehová ha bendecido; Dios, pues, te dé del rocío del
cielo, y de las grosuras de la tierra, y abundancia de trigo y de
mosto.
Vemos a Jacob viniendo cerca de su
padre, sentir su beso, y escuchar sus palabras de bendición. Pero también
olemos a Jacob. El amor de Isaac por Esaú es resaltado por su complacencia
en el olor de sus hijo. Al mismo tiempo, la profundidad de la alevosía de
Isaac es descrita por esta decepción olfativa.
Las audiencias originales de las
historias del Antiguo Testamento estaban agudamente conscientes del olor
de los animales, de las heridas, de la muerte, de las flores, de los
perfumes, y de los aceites. Los olores pueden ser más o menos explícitos,
pero proporcionan discernimientos importantes dentro de las historias del
Antiguo Testamento.
Gustativas. La imaginación
gustativa, las experiencias de imaginación del gusto también ocurren en
las historias del Antiguo Testamento. Cuando aparecen comida y bebida,
podemos estar seguros de que el escritor quería que su audiencia asociara
los eventos con el sabor. A veces la predominancia de este tipo de
imaginación es notable. Por ejemplo, al final de la celebración de la
llegada del arca a Jerusalén leemos: "Y repartió a todo el pueblo, y a
toda la multitud de Israel, así a hombres como a mujeres, a cada uno un
pan, y un pedazo de carne y una torta de pasas. Y se fue todo el pueblo,
cada uno a su casa". (2 Samuel 6:19).
¿Por qué el escritor de Samuel incluye
esta escena? ¿Quería meramente que sus lectores vieran las escenas y
escucharan los sonidos de la celebración? Aparentemente no. También estaba
interesado en que tuvieran ellos experimentaran la delicia gustativa del
evento. Lo maravilloso de la celebración se hizo patente cuando los
lectores originales imaginaron el sabor de los pasteles que se les había
dado a todos. Después de esta imaginación festiva, el registro del
reproche de Mical (2 Samuel 6:20-23) es aún más ofensivo.
Una vez más debemos de reconocer que la
imaginación gustativa puede ser más o menos explícita. Los escritores del
Antiguo Testamento no lo enfatizaron en detalle cada vez que aparecía. Aún
así, al encontrarnos con el sentido del gusto en las narraciones del
Antiguo Testamento, debemos de reconocerlo como una faceta del significado
original del escritor.
A través de las narraciones del Antiguo
Testamento, las escenas tocan todos nuestros cinco sentidos. La
imaginación visual, auditivo, del tacto, del olfato y del gusto incluyen
facetas esenciales de la descripción de una escena. Al investigar las
narraciones del Antiguo Testamento, debemos preguntarnos: "¿Qué veo?"
"¿Qué escucho?" "¿Qué toco y siento?" "Qué huelo?" y "¿Qué sabor siento?"
Al hacernos estas preguntas abrirán para nosotros muchas dimensiones de
las historias del Antiguo Testamento.
Ejemplos
Para ilustrar volveremos a ver Génesis
15:7-21 y 2 Crónicas 12:1-12. Nuestros resúmenes de la imaginación en
estas historias serán breves, pero mostrarán la importancia de las escenas
imaginativas para la interpretación.
Génesis 15:7-21 está atestado con
imaginación. La escena uno (vv. 7-9) tiene varios niveles. El enfoque
principal es el auditivo. Acertamos a oír un diálogo entre Dios y Abram
con relación a la posesión de la tierra de Canaán. En el diálogo la
imaginación de varias sub-escenas sobresalen. En el versículo 7 podemos
imaginarnos los recuerdos de Ur y la migración con sus vistas, sonidos y
olores. En la pregunta de Abram (v. 8), no solamente escuchamos y vemos a
Abram pedir seguridad, sino también tenemos el sentido del tacto de su
tenso anhelo. Finalmente, en el mandato de Dios de juntar los animales,
Moisés alista cada animal por separado para que sus lectores pudieran
imaginativamente visualizarlos, escucharlos, tocarlos y olerlos (v. 9).
En la segunda escena (v. 10), vemos a
Abram una vez más ante Dios con los animales. El enfoque principal de esta
escena está en la acción de cortar. Abram toma un cuchillo, corta los
animales a la mitad, y arregla las mitades en dos filas. Muchos lectores
modernos fácilmente pasan por alto la dimensión sensorial de esta escena.
Pero aquellos familiarizados con la matanza de animales conocen los
sonidos del forcejeo, el penetrar la carne, el separar las mitades todavía
calientes, y aún el olor de la carnicería.
La escena tres es principalmente visual
(v. 11). Vemos a Abram, la carnicería, y el acercamiento de aves de
rapiña. Abram las ahuyenta, quizá corriendo, gritando y moviendo sus
brazos.
La cuarta escena llama la atención
inmediatamente al horizonte en donde un sol que se está poniendo es apenas
visible (vv. 12-16). Abram se duerme. Al ver dentro de su mente, vemos una
espantosa obscuridad. Sentimos sus tensiones en tanto que el terror se
apoderó de él. También escuchamos hablar a Dios dirigiéndose a Abram en su
sueño. Sus palabras crean vistas y sonidos del futuro. Las tensiones se
elevan hasta que Dios le dice a Abram qué le pasará a él y a sus
descendientes.
La escena cinco (v. 17) remarca que el
sol se ha ocultado. La obscuridad de lo noche rodea a Abram. Rompiendo esa
obscuridad, aparece un horno humeando y una antorcha de fuego. El naranja
y rojo ardientes resplandecen de la antorcha y del humo, las sombras se
perciben sobre la carne en tanto que pasan entre las piezas, y el
chasquear de las flamas sobresalen en esta escena.
Finalmente, la escena seis refleja el
último diálogo divino (v. 18). Escuchamos a Dios hablar a Abram al exponer
la promesa que abrió esta historia. Vemos a Abram ante Dios y la vista de
los ríos y tierras que Dios prometió a Abram.
Segunda de Crónicas 12:1-12 comienza
con una visión fugaz del cuarto año de reinado de Roboam, en el que él y
su pueblo se apartó de la ley de Dios. en la segunda escena (v. 2), vemos
a Roboam y Jerusalén rodeados por Sisac. Sin lugar a dudas con la
imaginación visual y auditiva de los sonidos de un sitio que hubieran
traído a la mente de los lectores originales.
La escena tres (vv. 3-4) se enfoca
principalmente en las vistas y sonidos de la derrota de Judá. Todo 2 de
Crónicas 12:3 está dedicado a dar a la audiencia la vista abrumadora de
los carros de Sisac, de sus jinetes y de los soldados. Vemos el masivo e
innumerable ejército moviéndose con muy pocos inconvenientes hasta las
puertas de Jerusalén.
En las escenas cuatro, cinco y seis
(vv. 5-8), los horizontes se reducen. Vemos a Semaías el profeta, a Roboam
y a los nobles de Judá juntos en los confines de Jerusalén. Tenemos una
visión fugaz del Señor el cielo. Sin embargo, lo más central de estas
escenas son los sonidos de las proclamaciones proféticas y del
arrepentimiento de los nobles. Debemos de notar la actitud específica de
humildad y la reacción corporal asociada. El horror de escuchar el oráculo
inicial de juicio y el alivio del indulto también forman una imaginación
importante en esta escena.
La escena siete (v. 9) menciona el
levantamiento de los tesoros reales. Podemos ver los escudos de oro
relucientes con los ojos de nuestra imaginación. Implícitamente podemos
sentir los sonidos asociados con estos eventos y la experiencia tangible
de dolor que sintieron los personajes al ver vacíos los tesoros reales.
En la escena ocho (v. 10), vemos a
Roboam ordenar a sus hombre hacer réplicas de bronce de los escudos y
protegerlos. La escena nueve (v. 11) presenta las vistas de Roboam yendo
al templo y a los guardas llevando los escudos de bronce a la cámara de la
guardia.
En la escena diez (v. 12), vemos y
escuchamos a Roboam humillándose periódicamente en el templo. Un gran
rango de imaginación viene a la mente al contemplar las buenas condiciones
en Judá que resultaron en tanto que Roboam continuó humillándose.
Al reflexionar en la imaginación de
este texto, nuestros corazones y mentes son llevadas dentro de la
historia, y podemos entender más de una manera más completa lo que el
Cronista buscaba comunicarle a su audiencia original.
Investigar la descripción de la escena
en las historias del Antiguo Testamento involucra mucho más que evaluar
correctamente los hechos y principios. También debemos de tener en cuenta
la imaginación vívida - las vistas, sonidos, toques, sabores y olores -
que contribuyan notablemente a su significado original.
Conclusión
Comenzamos este capítulo sugiriendo que
debemos de aprender a apreciar el diseño artístico de las narrativas del
Antiguo Testamento. Para comenzar esta dimensión de interpretación, hemos
visto tres aspectos de la descripción de escena. Notamos cómo dividir los
textos en escenas, y hemos explorado la importancia de las variaciones de
espacio y tiempo. También vimos el valor de la reflexión en la imaginación
de escena. Estas consideraciones abren la manera para que nosotros podamos
ver el talento artístico de las narrativas del Antiguo Testamento y de
comprender de una manera más completa el significado original de sus
unidades más básicas.,
Preguntas de Repaso
- ¿Qué es una escena en las historias del Antiguo Testamento? ¿Por qué
est tan importante dividir una historia en escenas? ¿Qué claves nos
ayudar a dividir una historia en sus escenas? ¿Cómo podemos resumir una
historia en términos de sus escenas?
- ¿Qué queremos decir por las variables de espacio y tiempo en las
escenas? Describe el proceso para dar valores de espacio-tiempo a una
escena. ¿Cómo nos ayudan estas variables para notar el énfasis del
autor?
- ¿Qué es la imaginación en las escenas? ¿Qué tipos de imaginación
puedes encontrar en las narrativas del Antiguo Testamento? Da un ejemplo
de cada uno. ¿Cuál es el valor de notar estas facetas en las historias
del Antiguo Testamento?
Ejercicios de Estudio
- Ve Éxodo 1:22-2:10. Divide este episodio en sus escenas. Especifica
los rasgos del texto que indican un cambio en las escenas; resume cada
escena en un enunciado.
- Examina las variaciones espacio-tiempo en cada escena en Éxodo
1:22-2:10. Otorga un valor a cada escena como se ha indicado en este
capítulo. Basado en tu análisis, ¿qué escenas parecen estar enfatizadas?
- Resume la imaginación explícita e implícita en Éxodo 1:22-2:10. ¿Qué
discernimientos te proporcionan tus resúmenes de la
imaginación?
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