“Me gustaría tener información bíblica sobre enamoramiento y noviazgo, si es posible.”

Pues, no es una pregunta sencilla, y de verdad, hay mucha información que tiene que ver con su pregunta, y no puedo contestarla completamente. Para comenzar, el noviazgo en la Biblia fue bajo la supervisión de los padres. Es decir, si alguien querría casarse con una mujer con un hombre, estaba obligado pedir el permiso de los padres. Esto no quiere decir que ninguna persona ejerció su propia voluntad en el asunto. Por ejemplo, cuando Jacob amó a Raquel, ofreció trabajar unos siete años para casarse con ella. Pero, es importante distinguir entre las costumbres de la gente de esta época y lo que dice Dios es su palabra. 

También, es necesario decir que el amor sexual es bueno, pero, solo dentro del matrimonio, como dice el apóstol San Pablo en 1 Corintios 7:2, “pero a causa de las fornicaciones, cada uno tenga su propia mujer, y cada una tenga su propio marido,” y lo que queda en el mismo capítulo. También, es lícito el amor romántico, lo que es evidente del libro entero de Cantares. Y, esta es la verdad si entendemos el libro de Cantares literalmente como un libro de amor romántico, o como una alegoría del amor del Cristo por la iglesia, porque no va a utilizar una alegoría de algo pecaminoso para mostrar el amor de Jesucristo por la iglesia.

Pero, debido las diferencias entre nuestras culturas, ¿cómo debe de ser el noviazgo hoy en día? Pues, hay toda indicación en las Escrituras que los hijos están bajo la autoridad de sus padres hasta que se casen (y no hasta que salgan con sus novias), porque leemos en Génesis 2:24, “Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.” La implicación clara de este pasaje, que está repetido varias veces, es que los hijos están bajo la autoridad de sus padres hasta que se casen. A la misma vez, vemos los ejemplos como de Jacob, y vemos a las personas ejerciendo su propia voluntad en el asunto de casarnos.

Pues, entiendo que Ud. nos preguntó sobre el noviazgo, pero, creo que el propósito el noviazgo no es salir con su novio o novia, sino buscar una persona apropiada para ser su pareja para la vida. Por eso, una cosa que es necesario decir es que los creyentes solo pueden buscar una pareja dentro del cuerpo de Cristo, y no entre los incrédulos, porque el Señor nos dice en 2 Corintios 6:14, “No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas?” Y no es solamente el mandamiento (aunque sea suficiente), sino lo que dice el Señor, “¿qué comunión tiene la luz con las tinieblas?” es decir, que nosotros que somos de la luz, ¿cómo es posible que estemos con los de las tinieblas en la oscuridad?

Por supuesto, hay mucho más que decir, pero, tal vez sea algo para comenzar. Y si quiere continuar con más, estoy a sus pies para servirle en Cristo Jesús.


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