EL ESPÍRITU DE DIOS

  por PASTOR: LICENCIADO OSCAR ENRIQUE TENES

INTRODUCCION:

La Biblia menciona en el evangelio en 1 Corintios 2:12 lo siguiente: “Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido” 

Basados en este pasaje podemos afirmar que la Biblia aquí esta mencionando la existencia de dos espíritus: El espíritu del mundo y el Espíritu que proviene de Dios. Asimismo notamos que cuando la Biblia habla del Espíritu de Dios se escribe la palabra Espíritu con “E” mayúscula, y cuando es otro espíritu incluido tanto el espíritu del hombre, como el espíritu del mundo se escribe con “e” minúscula.

Ahora bien, ¿cual es uno y cual es el otro?  Esto lo veremos en este estudio; además en este corto estudio dilucidáremos que realmente es andar en el Espíritu de Dios, y que es andar en el espíritu del mundo. Primeramente mencionaremos que andar en el espíritu del mundo no es fumar, beber (lo cual lógicamente no es bueno) sino que esto se produce como consecuencia de dejar que la mente carnal nos domine.  Dicho de otra forma andar en el espíritu del mundo es someterse a la ley de Moisés o a doctrinas de hombres, y andar en el Espíritu de Dios es someterse al evangelio que es la palabra de Dios, dada por Dios para nosotros sus hijos, en esta dispensación de la gracia, esto posterior a la cruz del calvario.


NUESTRO CAMINAR EN CRISTO

La palabra de Dios menciona en Romanos 7:25 “Gracias doy a Dios por Jesucristo Señor nuestro.  Asi que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado” 

Una pregunta importante que debemos plantearnos, en este momento es ¿Cómo le servimos a Dios con la mente? Para responder a esto, primeramente debemos analizar,  que en la Biblia muchas veces se menciona la palabra mente como sinónimo de espíritu;  Bajo esta premisa podemos acotar que cuando la Biblia establece en Romanos 5:5 “y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado” 

Según este versículo de Romanos dice que el Espíritu Santo ya nos fue dado; no que nos va a ser dado, éste ya nos fue dado, no es con que nos impongan manos, que se nos da el Espíritu Santo, como algunos piensan. 

Asi mismo la Biblia menciona en 1 Corintios 2:16 “Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién  le instruirá?  Mas nosotros tenemos la mente de Cristo”

Notemos en estos pasajes que la palabra Espíritu, es sinónimo de la palabra  mente. En otras palabras la palabra mente es sinónimo de la palabra espíritu.

Podemos detectar también y como es sabido por todo hijo de Dios, que todos nos mantenemos en una lucha espiritual, entonces, derivado de estos versiculos podemos entender que la lucha espiritual tiene lugar en nuestra mente (espíritu)  Así también, tal y como mencionamos en nuestro estudio anterior acerca de “la verdadera batalla de la fe” la lucha espiritual no se libra como algo externo, o en nuestro entorno,  sino que es algo interno dentro de cada hijo de Dios.  Esto es la lucha entre la mente de Cristo que usted y yo ya tenemos y la mente carnal que todos también tenemos;  Pablo menciona en Efesios 4:22-23 lo siguiente: “En cuanto a la pasada manera de vivir despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente” 

Lo que cada hijo de Dios debe hacer es ir renovando su mente (esto es el verdadero crecimiento espiritual) no es por hacer o no hacer posturas religiosas que no conducen a nada, solo a fanatismos o fetichismos; tampoco es por estar llevando a cabo  sacrificios los cuales sacrificios ya son obsoletos, se quedaron antes de la cruz. Es por ir renovando nuestra mente con la enseñanza del evangelio, y amado hermano en Cristo, el conocimiento del evangelio, este  si nos puede cambiar.

El evangelio es el que instruye acerca de: Si usted está o camina en el espíritu del mundo, o bien si camina en el Espíritu de Dios, fíjese que esto lo dice la Biblia en el evangelio y tajantemente podemos afirmar que no son  las opiniones personales. Jesucristo mismo estableció el evangelio en la mente de Pablo, y Pablo lo plasmo y lo dejó escrito en sus cartas en la Biblia.  Esto con el propósito de que nos sirvieran a nosotros como un manual de vida.

En nuestra introducción mencionamos a 1 Corintios 2:12 que dice: que nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu de Dios con el propósito de que sepamos lo que Dios nos ha concedido.

El propósito no es hablar en lenguas, danzar o revolcarse por el piso.  Tampoco es someternos a sacrificios que emanaban de la ley de Moisés, todo esto no es más que andar en el espíritu del mundo. Lo que es andar en el Espíritu de Dios es someternos al evangelio de la Biblia , lo cual  significa caminar en el Espíritu de Dios.

Por consiguiente conocer lo que Dios nos ha concedido, solo lo encontramos o estudiamos en el evangelio de la Biblia. Entonces  conociendo el Nuevo Pacto, podemos entender como andar en el Espíritu de Dios, esto implica entender y sobretodo obedecer lo que dice el evangelio que entre muchas cosas dice que estamos perfectos (Hebreos 10: 14). Estamos completos (Colosenses 2:10) dice que ya no es por obras para que nadie se glorié, es únicamente por el sacrificio de Cristo en la cruz  (Efesios 2:8-9).

Por consiguiente  si usted está en el espíritu del mundo, que es la ley de Moisés, nunca sabrá lo que Dios le ha concedido. Solamente conociendo el evangelio podemos realmente conocer tanto el sacrificio de Dios y lo que eso implico, como también las grandes promesas de Dios.  Caso contrario seguiremos en esclavitud sometidos a la ley de Moisés  o a doctrinas de hombres corruptos de entendimiento.



EL ESPIRITU DEL MUNDO

Como ya enunciamos anteriormente el andar en el espíritu del mundo, es andar sometidos a la ley de Moisés o a doctrinas de hombres, leemos en la Biblia en Galatas 5:16-18 “Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.  Porque el deseo de la carne (espíritu del mundo) es contra el espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.  Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley”

Hay bastante claridad en este pasaje de Galatas y nos menciona claramente que:  Cuando somos guiados por Dios esto es aparte de de la ley; lo mismo sucede con nuestra justificación que es aparte de la ley, por consiguiente cuando alguien erróneamente se somete a la ley de Moisés además de caer en esclavitud, asimismo para esta persona, el  sacrificio de Cristo en la cruz no tiene importancia, recordemos que a través de ese sacrificio fuimos justificados leamos Romanos 3:21 “Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y los profetas”  De tal forma que en nuestra justificación en la cruz del Calvario nada tuvo que ver la ley, que simplemente fue un ayo para llevarnos a Cristo.

Ahora, cabria una pregunta y esta es: ¿cómo identificamos el espíritu del mundo? Ese espíritu lo vemos en algunas congregaciones, en donde prohíben hacer cosas asi como también no hacerlas, identificándose exactamente con lo que es del mundo, ya que el evangelio de Moisés no era el espíritu que agradaba a Dios.

La ley dada por Dios a Moisés nunca fue el corazón de Dios, fue una añadidura (Galatas 3:19) con ella se dio a conocer el mal.  Era un pacto con defectos, por eso Dios proveyó un pacto mejor, lo podemos leer en 2 Corintios 3:6-10 que dice: “el cual asimismo nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, no de la letra sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica.  Y si el ministerio de muerte grabado con letras en piedras fue con gloria, tanto que los hijos de Israel no pudieron fijar la vista en el rostro de Moisés a causa de la gloria de su rostro, la cual había de perecer, ¿Cómo no será más bien con gloria el ministerio del espíritu? Porque si el ministerio de condenación fue con gloria, mucho más abundará en gloria el ministerio de justificación.  Porque aun lo que fue glorioso, no es glorioso en este respecto, en comparación con la gloria más eminente”

CONCLUSION:

Entonces el espíritu del mundo (cuando nos dejamos absorber por lo que llega a nuestra mente carnal) y el Espíritu de Dios (cuando nos manejamos con la mente de Cristo, que se extrae del evangelio en la Biblia ) son dos espíritus; igual que hay dos apostolados: El apostolado de la circunsición y el apostolado de la incircunsicion Leamos a Galatas 2:7-8 “Antes por el contrario, como vieron que me había sido encomendado el evangelio de la incircunsicion, como a Pedro el de la circunsición (pues el que actuó en Pedro para ele apostolado de la circunsición, actuó también en mí para con los gentiles)

Asimismo existen dos sabidurías: La del mundo y la predestinada. Lo confirma 2 Corintios 11:4 que dice: “Porque si viene alguno predicando a otro Jesús que el que os hemos predicado, o si recibís otro espíritu que el que habéis recibido u otro evangelio que el que habéis aceptado bien lo toleráis” 

Amados hermanos lo importante de este corto estudio es entender que el l espíritu del mundo es  la circuncisión (la ley dada por Dios a Moisés) asi como las doctrinas de hombres que han perneado en todo el ámbito Cristiano en este tiempo,  y el Espíritu de Dios es la incircunsicion (el evangelio de la gracia contenido fundamentalmente en los escritos Paulinos)  ¡GLORIA A DIOS!


PASTOR: LICENCIADO OSCAR ENRIQUE TENES
MINISTERIO DE JESUCRISTO RESUCITADO
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